La enseñanza del inglés como segunda lengua se ha vuelto una prioridad en muchos sistemas educativos debido a la creciente globalización. Una de las metodologías más efectivas y beneficiosas para enseñar inglés es a través de la lectura, particularmente la lectura multimodal. Esta metodología no solo facilita el aprendizaje del idioma, sino que también contribuye al desarrollo psicoemocional y cognitivo de los niños. A continuación, se presentan argumentos pedagógicos y basados en el desarrollo infantil que destacan la conveniencia de esta estrategia.

Argumentos Pedagógicos.

  • Lectura y Comprensión: Según Krashen (1982), la adquisición del lenguaje ocurre de manera más efectiva a través de la comprensión significativa de contenido, como la que se obtiene mediante la lectura. La exposición a textos en inglés permite a los niños desarrollar su vocabulario, gramática y comprensión lectora de manera integrada.
  • Contexto y Uso Real del Lenguaje: La lectura de textos auténticos, especialmente los multimodales, proporciona contexto y uso real del lenguaje, lo cual es fundamental para el aprendizaje efectivo. Meyer (2013) destacan que la exposición a diversos formatos textuales (visual, auditivo, y kinestésico) enriquece la comprensión y retención de información.
  • Interacción Multisensorial: La lectura multimodal, que incluye textos acompañados de imágenes, sonidos y actividades interactivas, aumenta el interés y la motivación de los estudiantes. Según una investigación de Sipe (2008), los niños muestran un mayor compromiso y disfrute al interactuar con materiales multimodales, lo cual mejora su disposición para aprender.
  • Aprendizaje Activo: Las plataformas multimodales fomentan el aprendizaje activo. Los niños no solo leen, sino que también participan activamente al interactuar con los contenidos, lo que según Dale (1969) en su “Cono de la Experiencia”, conduce a una mayor retención del aprendizaje.

  Desarrollo Cognitivo

  • Mejora de las Habilidades Cognitivas: Estudios han demostrado que la lectura en una segunda lengua mejora las funciones ejecutivas del cerebro. Según Bialystok (2001), los niños bilingües muestran una mayor flexibilidad cognitiva, habilidades superiores de resolución de problemas y una mejor capacidad para realizar tareas múltiples.
  • Enriquecimiento del Vocabulario: La exposición a una variedad de textos en inglés ayuda a los niños a construir un vocabulario amplio y diverso. Nagy y Herman (1987) encontraron que los niños que leen regularmente adquieren significativamente más palabras nuevas que aquellos que no lo hacen.
  • Rendimiento Académico: Un estudio realizado por la OCDE (2011) encontró que los estudiantes que leen habitualmente por placer en su lengua materna y en una segunda lengua tienen un rendimiento significativamente mejor en lectura y matemáticas.
  • Competencias Multimodales: Según un informe de The New London Group (1996), los niños que aprenden a través de métodos multimodales desarrollan mejores competencias comunicativas y tecnológicas, preparándolos mejor para el entorno digital contemporáneo.

Desarrollo Psicoemocional

  • Autoestima y Confianza: La lectura en inglés puede aumentar la autoestima y confianza de los niños al ver su progreso y entender textos en un segundo idioma. Según Cummins (2000), el éxito en el aprendizaje de una segunda lengua refuerza la autoestima y la identidad personal de los estudiantes.
  • Empatía y Comprensión Cultural: La lectura de literatura en inglés expone a los niños a diferentes culturas y perspectivas, fomentando la empatía y la comprensión intercultural. Esta exposición es crucial en el desarrollo emocional y social de los niños (Nikolajeva, 2014).

La implementación de la lectura multimodal en la enseñanza del inglés no solo mejora la adquisición del idioma, sino que también contribuye al desarrollo integral de los niños. Los argumentos pedagógicos y los beneficios cognitivos y psicoemocionales destacan la importancia de esta metodología. Al proporcionar un entorno de aprendizaje rico y variado, se promueve una educación más efectiva y motivadora, que prepara a los niños para enfrentar los desafíos de un mundo cada vez más globalizado y digital.

Eduardo Lara Cera